Hoy tuve reunión de copropietarios del edificio. Sin Twitter. Son aún más aburridas de lo que pensé en las últimas cuatro, con Twitter.
Ahora estoy sentada frente a un computador con un archivo lleno de apuntes desordenados para terminar a partir de eso un artículo que debo entregar el jueves y que debe ser coherente porque no soporto otra nota bajita este semestre. Creo que una de mis clases me va a quedar en 3.5 y estoy mortificada. Todo esto sin Twitter. Y lo peor es que no tengo ni idea que escribir: todo se me ocurre en 140 caracteres.
Para rematar la situación, Salas está en Cartagena atrapado en el aeropuerto. Tiene fiebre y está sintiéndose mal. Yo no me estoy sintiendo muy bien tampoco. Tengo tos desde que acabé la carrera de Unicef ayer y mi búsqueda en Internet (el paraíso de los hipocondriacos) dice que tengo "Exercise induced asthma". En el fondo, sé que lo que tengo es gripa no más, pero cada vez que me toca jalarle al Ventilan y al Medrol para respirar bien me pongo paranoica. Obviamente, esto también sin Twitter.
Finalmente, a @pelucavieja lo entrevistó mi señora tía y me muero por saber cómo fue. Estoy segura de que los dos trinaron qué pasó en la entrevista y estoy segura de que fue muy divertido. Pero bueno, me enteraré el próximo domingo cuando oiga el programa. Como si no existiera Twitter.
lunes, noviembre 21, 2011
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1 comentario:
Pa respirar es bueno el wasabi.
La vida sin twitter se siente rara y el blog y el trabajo vuelven a saber bueno. Ánimo.
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